BASES CIENTÍFICAS PARA UN ÓPTIMO RENDIMIENTO (I)

El rendimiento físico óptimo depende de muchos factores. La carga genética, el ambiente familiar y social, la calidad y cantidad de entrenamiento, el modelo de aprendizaje, la prevención de lesiones, el tratamiento de las mismas, el estado de salud del individuo, su alimentación, la preparación de las competiciones, el conocimiento de los rivales, las enseñanzas de los entrenadores, etc. Son tantos los factores físicos, técnicos, tácticos y psicológicos existentes, más todavía en un deporte de equipo como el fútbol, que pretender dominarlos todos una sola persona es poco menos que imposible. No lo es, sin embargo, que cada profesional en su área aporte sus conocimientos en la búsqueda del mejor resultado global del individuo, y reciba la información que reside en los otros ámbitos del trabajo con el deportista y que en ocasiones quedan desmerecidos por la ausencia de un conocimiento básico de los mismos. Sin duda, conocer aspectos que influyen en el rendimiento deportivo o en la recuperación del futbolista, por ejemplo, ayudará a mejorar la eficacia de nuestro trabajo y a identificar el rendimiento físico como una unidad que depende del trabajo en equipo del deportista, su familia, el entrenador, los preparadores físicos, el servicio médico y el correspondiente al apoyo científico-tecnológico, en aquellos clubes que puedan disfrutar de él.